En los últimos años, ha habido un aumento significativo en la demanda de proyectos de construcción sostenibles y eficientes en el consumo de energía. Los arquitectos y profesionales de la construcción deben estar preparados para abordar esta necesidad en el diseño y construcción de edificaciones, lo que entre varias cosas implica la incorporación de medidas de eficiencia energética en el uso de la electricidad, gas y agua.
El objetivo de este artículo es proporcionar a profesionales de la arquitectura información relevante para reducir la pérdida de calor, mejorar la calidad del oxígeno y aprovechar la energía renovable y reducir los residuos. Para ello, se debe considerar una serie de factores, como la orientación de la edificación, la selección de materiales de construcción, la instalación de sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado eficientes, la incorporación de tecnología de energía renovable, y la implementación de prácticas de uso eficiente del agua.
¿Cómo podemos hallar soluciones prácticas para construir para el ahorro energético? A continuación, algunos datos relevantes para afrontar este tipo de proyectos de una forma óptima destinados a la gestión de proyectos de arquitectura, trabajos de reformas y todo profesional interesado del sector.
Obras para Ahorro de energía y luz eléctrica
Ventajas de las bombillas LED
Las bombillas LED son una excelente opción para la iluminación eficiente, ya que consumen hasta un 80% menos de energía que las bombillas tradicionales y tienen una vida útil más larga. Además, su utilización puede significar una gran reducción en la factura eléctrica.
¿Cómo elegir las bombillas LED adecuadas para ahorrar luz? Una de las claves es elegir la temperatura de color adecuada para cada zona de la vivienda. A modo de ejemplo, en las áreas de trabajo como la cocina y el estudio, puede recomendarse una luz blanca fría de 5000K o más para aumentar la productividad y la concentración. En cambio, para los espacios de descanso como el dormitorio y la sala de estar, se aconseja una luz más cálida de 2700K a 3000K para generar una atmósfera acogedora y relajante.
Es importante tener en cuenta que la elección de la temperatura de color también dependerá de la luz natural que recibe cada espacio, ya que, si una habitación recibe mucha luz natural, se puede optar por una luz más fría para equilibrar la temperatura de color en la estancia.
Diseñar para reducir el uso de calefacción y aire acondicionado
Para reducir el consumo de energía en climatización mediante calefacción o aire acondicionado, es importante diseñar una envolvente térmica eficiente. Para la construcción de viviendas sostenibles, es recomendable utilizar materiales con una alta inercia térmica, como mampostería, hormigón o ladrillo, ya que pueden absorber y liberar calor de manera más efectiva que otros materiales.
Un factor muy importante es la colocación de ventanas y puertas en lugares estratégicos, para aprovechar la ventilación natural, así como mediante la instalación de sistemas de ventilación mecánica controlada.
Es especialmente importante prestar atención a las ventanas, ya que pueden ser un punto débil en la envolvente térmica del edificio. Las ventanas deben ser de alta eficiencia energética, con doble o triple acristalamiento y marcos de bajo perfil, para reducir la transferencia de calor y la entrada de ruido. Materiales aislantes como PVC, madera tratada o aluminio con rotura de puente térmico, permiten una buena transmisión lumínica y una alta capacidad de aislamiento de temperatura. Además, se pueden utilizar películas de control solar para reducir el impacto del calor solar en el interior del edificio.
Ahorro y reutilización de agua en obras
Dispositivos de bajo consumo de agua
Los grifos y duchas de bajo caudal están diseñados para reducir la cantidad de agua que fluye por ellos. Algunos modelos vienen con la tecnología de control de temperatura para evitar el desperdicio de agua mientras se espera que se caliente. A modo ilustrativo, una ducha de bajo caudal puede reducir el uso de agua en un 50% en comparación con una ducha convencional.
En el caso de los inodoros de doble descarga, estos tienen dos botones: uno para descargas completas y otro para descargas parciales, lo que permite al usuario controlar la cantidad de agua utilizada en cada descarga. En comparación con los inodoros convencionales, los inodoros de doble descarga pueden reducir el consumo de agua hasta en un 67%.
Finalmente, los urinarios sin agua son una opción eficiente y de bajo consumo para baños públicos y comerciales. En lugar de utilizar agua para la descarga, utilizan una trampa sellada que atrapa los olores y evita la formación de bacterias, lo que resulta en una reducción significativa en el uso de agua
Sistemas de recolección de lluvia y tratamiento de aguas grises
Los sistemas de recolección y reciclaje de agua permiten recolectar, almacenar, tratar y reutilizar el agua de lluvia y las aguas grises generadas en el edificio. Los sistemas de recolección de agua de lluvia se basan en la captación de la lluvia que cae sobre el tejado del edificio y su almacenamiento en un depósito para su posterior uso en tareas no potables, como el riego de jardines, limpieza de superficies y descarga de inodoros.
Por su parte, los sistemas de tratamiento de aguas grises consisten en la captación, tratamiento y almacenamiento de las aguas residuales generadas en duchas, lavabos y lavadoras, para su posterior uso en tareas no potables, como el riego de jardines, limpieza de superficies y descarga de inodoros. Los sistemas de tratamiento de aguas grises pueden incluir diferentes tecnologías, como filtros, membranas y desinfectantes, para asegurar la calidad del agua tratada.
¿Cuán beneficiosos pueden ser estos sistemas sustentables de reutilización de agua? Una aplicación exitosa de estos sistemas de recolección de agua de lluvia y tratamiento de aguas grises puede alcanzar a abastecer el 100% de las necesidades no potables de un edificio.
Obras de Ahorro de gas y mejoras de climatización
Sistemas de calefacción eficientes
Para lograr una calefacción eficiente y ahorrar en el consumo de gas, se recomienda la instalación de sistemas de calefacción que permitan un control individualizado de la temperatura en cada habitación. Los sistemas de calefacción por zonas, mediante termostatos programables, son una excelente opción para mejorar la climatización de los ambientes y espacios.
Adicionalmente, se pueden utilizar calderas de alta eficiencia que aprovechen mejor la energía del combustible y reduzcan el consumo de gas. Estas calderas suelen contar con tecnología de condensación, que aprovecha el calor del vapor de agua presente en los gases de combustión para calentar el agua que circula por el sistema de calefacción.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es la eficiencia de los radiadores. Los radiadores energéticamente eficientes pueden estar hechos de materiales como aluminio, acero o cobre, y pueden tener un diseño de alta conductividad térmica para maximizar la transferencia de calor. Además, se pueden instalar sistemas de purga automática de aire para evitar que el aire presente en los radiadores disminuya su eficiencia.
Tecnología de calefacción de biomasa y geotérmica
La tecnología de calefacción de biomasa y geotérmica son alternativas muy eficientes y amigables con el medio ambiente para reducir el consumo de gas en edificios. La calefacción de biomasa utiliza combustibles renovables como pellets de madera, astillas de madera o pellets de cáscara de frutas para generar calor. La calefacción geotérmica aprovecha el calor almacenado en el subsuelo para calentar el agua que circula por tuberías y que luego se distribuye por el edificio.
Ambos sistemas pueden ser muy eficientes en términos de ahorro de gas, ya que la biomasa y la energía geotérmica son fuentes de energía renovables y sostenibles que no generan emisiones nocivas. Además, suelen tener un costo más bajo que los sistemas tradicionales de calefacción a gas. Sin embargo, elegir entre ambos sistemas dependerá del tipo de proyecto arquitectónico y construcción que se esté desarrollando, así como de las necesidades de calefacción de los usuarios.
Para elegir la mejor opción, es importante considerar la ubicación geográfica del edificio, el tamaño del mismo y el clima de la región. La calefacción de biomasa puede ser una buena opción en zonas rurales donde hay disponibilidad de combustibles renovables, mientras que la calefacción geotérmica puede ser más efectiva en zonas urbanas donde hay menor disponibilidad de biomasa. También es importante considerar el presupuesto disponible, los costos de instalación y mantenimiento de ambos sistemas.
Al planificar una construcción que ahorre electricidad, gas y agua, no solo se beneficia al medio ambiente, sino también a la economía de hogares y negocios. Aquí hemos revisado algunos lineamientos generales para el desarrollo de una arquitectura más ecológica y verde. La implementación de tecnología de energía renovable y dispositivos de bajo consumo siempre deberá adaptarse a las necesidades específicas de cada proyecto.
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